1. Hay personas con necesidad de una vivienda con características comunes.
    
2. La cooperativa se hace eco y adquiere, con el apoyo de la administración y/o de una entidad financiera, un solar adecuado a estas necesidades que permitirá promover las viviendas mediante la constitución de lo que se denominará una Comunidad de Propietarios o Fase Cooperativa.
    
3. La cooperativa negocia con la entidad financiera una hipoteca común para todos los socios. Al final del proceso, todos los socios podrán subrogarse a la hipoteca que se pactó inicialmente, consiguiendo a menudo condiciones ventajosas.
    
4. La cooperativa, organización sin ánimo de lucro y de estructura reducida, contrata los servicios de una empresa que se encargará de la gestión integral de las diferentes fases. La empresa gestora se encarga de todo el proceso de desarrollo de la promoción. Este proceso se lleva a cabo en constante contacto y bajo la supervisión del Consejo Rector de la Cooperativa, el Consejo de Fase y los socios.
    
5. Los socios escogen entre sus miembros a aquellos que forman el Consejo de Fase, órgano regulador y representativo de todo el colectivo. Este órgano está directamente informado de cada paso en la evolución de la fase cooperativa. Por otra parte, anualmente se celebra una Asamblea General de la Fase Cooperativa a la que asisten todos los socios.
    
6. Una vez acabado el proceso de obra, realizadas las visitas de obra y calidad, la Cooperativa adjudica las viviendas a sus socios ante notario.
    
7. Finalmente, se procede al servicio de posventa de las viviendas y, una vez concluido y logrado el objetivo fundamental de los socios, se da de baja la fase cooperativa.

El modelo de comunidad de propietarios tiene muchas ventajas para el socio porque se trata de un sistema:
 

• Racional. Proporciona al socio la vivienda que necesita y al precio que cuesta hacerla porque paga por él mismo el coste del solar, de la construcción y de la gestión.
   
• Seguro. Es un sistema de acceso a la vivienda con un doble marco regulador: la Ley de cooperativas y los propios estatutos de la cooperativa. Además, es importante destacar que cada promoción impulsada por la cooperativa constituye una fase económicamente independiente, de manera que no se vea comprometida en ningún caso por la viabilidad de las otras.
   
• Participativo y democrático. Los socios conocen todas las decisiones que se toman. De hecho, cada socio tiene un voto.
  Para facilitar la organización interna, se crean diferentes órganos de participación: Consejo de Fase, asambleas generales de fase y asambleas generales de la cooperativa. El Consejo de Fase está formado por varios representantes escogidos por los propios socios y este se reúne de manera periódica con el Consejo Rector y la empresa gestora para conocer los avances de la promoción.
   
• Transparente. En todo momento se informa al socio del estado de la promoción mediante las reuniones del Consejo de Fase, las asambleas generales de fase, las asambleas generales de la cooperativa, las visitas de obra y los informes bimensuales.
   
• Sostenible. Como este sistema se basa en una demanda real no satisfecha, solo se construye donde hay una necesidad por cubrir.

Una promoción Inmobiliaria requiere de un equipo de profesionales que se responsabilicen de la gestión integral del proyecto.

Así, con la finalidad de garantizar el éxito de las promociones y reducir al mínimo los costes estructurales, se opta por la contratación de una empresa que gestione cada una de las fases de la cooperativa de manera integral.

Es empresa es SALAS, una gestora con casi 30 años de experiencia y más de 3.500 hogares entregados entre Catalunya y Baleares.